El Presidente de la República, Sebastián Piñera, acompañado del ministro de Educación, Joaquín Lavín, dio a conocer al país su propuesta en materia de reformas a la educación superior.
En tal sentido, el Mandatario anunció un acuerdo nacional por la educación, al que denominó “Acuerdo Gane”.
El jefe de Estado precisó como primera medida la creación de un Fondo para la Educación (FE), por un monto de 4 mil millones de dólares.
Asimismo, para mejorar el acceso y calidad del financiamiento a los estudiantes, anunció más becas y créditos más económicos. Para estos efectos, el Gobierno planteó aumentar de 70 a 120 mil las becas para la educación técnico-profesional e incrementar en un 20% su monto.
De igual forma, afirmó que “se busca garantizar al 40% de alumnos más vulnerables, y con mérito académico, una beca para acceder a la institución de Educación Superior acreditada que ellos elijan”.
En su mensaje presidencial, Piñera anunció también la reducción de la tasa de interés del Crédito con Aval del Estado, a cifras cercanas al 4% en un año normal, “permitiendo así, a través de mejoras y subsidios del Estado, una rebaja significativa del monto de las cuotas de pago, y una suspensión de éstas en casos de desempleo”.
Además, se convocará a un grupo de trabajo, para proponer un nuevo sistema que reemplace al actual Crédito con Aval del Estado, “por uno más justo y eficaz, como también rediseñar el Fondo de Crédito Solidario, para potenciar su recuperación y destinar esos recursos a nuevas becas, y reprogramar a los 110 mil deudores morosos, para permitirles reiniciar sus pagos y salir de Dicom”.
El Mandatario anunció mejorar los sistemas de admisión, acreditación, información y fiscalización del sistema universitario. “Para esto postulamos considerar el ranking y las notas escolares, además de la PSU, en los sistemas de admisión”.
A lo que agregó “fortalecer la profundidad y rigurosidad de los sistemas de acreditación, para garantizar mejor la calidad y transparencia. Establecer un sistema completo, oportuno y confiable de información de las instituciones de Educación Superior a sus alumnos y postulantes, para que éstos tomen decisiones informadas, incluyendo antecedentes académicos y financieros de la institución, y laborales de sus egresados, como empleabilidad y remuneraciones”.
Como cuarta medida para mejorar el acceso y calidad del financiamiento de los estudiantes, se anunció crear una nueva institucionalidad, a través de la Subsecretaría y Superintendencia de Educación Superior.
Así como también “establecer un nuevo trato con las universidades del Estado, mediante un estatuto que modernice el gobierno universitario, desburocratice y flexibilice su gestión, permita el endeudamiento a mayores plazos, cree un fondo basal para su revitalización, y refleje de esta forma el sólido compromiso del Estado con las universidades estatales y de éstas con el Estado y la sociedad”.
“En cuarto lugar –aseguró- se buscará definir una nueva institucionalidad para el sistema universitario, que diferencie universidades estatales, tradicionales no estatales y privadas no tradicionales”.
Piñera aseveró que “adicionalmente, aseguraremos la transparencias total del sistema y abriremos un debate amplio, para analizar la posibilidad de distinguir entre estas últimas, las sin y las con fines de lucro. De acordarse la existencia de estas últimas, ellas deberán pagar impuestos por sus utilidades, los que destinaremos íntegramente al financiamiento de becas y préstamos para los alumnos más vulnerables”.
El Presidente informó además que el Gobierno creará 3 fondos concursables, “al cual podrán postular las universidades, orientados a mejorar la calidad de la formación de profesores y directores de la educación escolar, a la creación de centros de excelencia en materia de innovación, ciencia y tecnología y a potenciar el aporte de las universidades regionales al desarrollo de sus respectivas regiones”.
El jefe de Estado finalizó su mensaje pidiendo la colaboración de todos los sectores involucrados para sacar adelante este denominado “Acuerdo Gane”, incluyendo a los alumnos en las salas de clases, los profesores en las aulas, los rectores y directores en sus instituciones, los padres y apoderados en sus hogares, los alcaldes en sus comunas, los parlamentarios en el Congreso, además del Gobierno.
