La delegación de Gobierno, encabezada por el Secretario Ejecutivo de la Comisión Nacional de Riego, junto a expertos de diversos sectores productivos vinculados al tema hídrico iniciaron una serie de reuniones y visitas a terreno para recoger la exitosa experiencia de Australia, país que superó exitosamente una década de sequía.
Con el claro objetivo de fortalecer la estrategia nacional para combatir la sequía y construir una sólida política hídrica, el Gobierno inició una gira por Australia y Nueva Zelanda para recoger sus experiencias, el conocimiento y la innovadora tecnología implementada por estos países con reconocimiento a nivel mundial.
La delegación encabezada por la Comisión Nacional de Riego (CNR), está integrada por representantes de la Dirección Nacional de Obras Hidráulicas (DOH) del Ministerio de Obras Públicas, de los ministerios de Agricultura y Desarrollo Social, de las Seremias de Agricultura de las regiones de O´Higgins y Maule, además de la Sociedad Nacional de Agricultura (SNA), la Cámara Chilena de la Construcción, servicios sanitarios y expertos en gestión hídrica.
“La conformación público privado de esta delegación da cuenta del trabajo que como Gobierno estamos desarrollando. Creemos que el agua debe ser una prioridad nacional y que los desafíos relacionados con la gestión del recurso requieren de un esfuerzo conjunto, incluyendo a todos los sectores productivos”, señaló el Secretario Ejecutivo de la Comisión Nacional de Riego, Felipe Martin.
La alianza establecida entre el Gobierno australiano y las distintas industrias ha sido clave para implementar un programa de reforma hídrica de amplio alcance. Las iniciativas emprendidas racionalizaron el uso del agua, mejoraron su gestión, hicieron rentable el sector y fomentaron la innovación.
Con más de una década de sequía, Australia a partir de la adversidad logró comprender la importancia del agua, aplicando importantes cambios que la llevaron a aumentar su productividad en más de un 50% y a una eficiencia en el uso del agua per cápita que está entre las mejores del mundo industrializado.
“Australia es un país que a pesar de tener una baja disponibilidad hídrica, dependiente fundamentalmente de las precipitaciones, ha alcanzado un gran desarrollo agrícola y económico, en tanto que en Chile perdemos el 84% del total del agua y sólo embalsamos el 4%, es decir, tenemos un enorme potencial de crecimiento que estamos desaprovechando. Es urgente contar con más obras que almacenen el agua superficial y subterránea”, expresó el Presidente de la Sociedad Nacional de Agricultura (SNA), Patricio Crespo.
Delegación en terreno
Uno de los ejemplos más destacados a nivel internacional, en cuanto a innovación tecnológica, es el Proyecto de Renovación de la Irrigación en Victoria del Norte (NVIRP), entidad estatal a cargo de planificar, diseñar y llevar a cabo el proyecto de modernización de riego más grande de Australia, el cual mejora la infraestructura hidráulica en el Distrito de Goulburn Murray (GMID), regando 600 mil hectáreas (ha.).
Se estima que en este sistema de riego se perdieron hasta 800 millones de metros cúbicos, a través de filtraciones, escapes, evaporación y otras ineficiencias. La inversión de dos mil millones de dólares australianos por parte de los gobiernos federal de Australia y estatal de Victoria, los usuarios de Melbourne Water y Goulburn-Murray Water está logrando ahorrar en promedio 425 millones de metros cúbicos anuales y aumentar la eficiencia en el uso del agua para riego a por lo menos 85%. Con 532 compuertas que automatizan el 75% del área de riego, los más de 14 mil regantes manejan sus negocios sabiendo con certeza que su provisión de agua es precisa y oportuna.
En Chile, este tipo de tecnología fue incorporada por la Junta de Vigilancia del Río Elqui, la cual suministra agua a 5 mil agricultores, quienes riegan 23 mil hectáreas, esta organización reemplazó las compuertas y la medición del caudal controladas en forma manual por nuevas compuertas automatizadas, las que permiten controlar y medir con precisión el agua entregada a seis de los canales más grandes de la cuenca del río Elqui. La inversión del proyecto fue bonificada por la Ley de Fomento al Riego, administrada por la CNR.