Esta mañana, en marco de la visita del ministro de Agricultura, Luis Mayol, se dieron a conocer dos herramientas que el sector agrícola utilizará para palear las consecuencias que ha traído el período de sequía. El bombardeo de nubes con nitrato de plata, y el cultivo de frutos que requieren bajas dosis del recurso hídrico.
En la región, desde la sequía que afectó al sector agrícola, el año 1991 aproximadamente, que no se realiza una estimulación de precipitaciones. Esta mañana, en la pista del Aeródromo La Florida, autoridades regionales e inversionistas del proyecto, firmaron el convenio que da inicio al proceso que se llevará a cabo, dependiendo de las condiciones climáticas, este fin de semana.
El ministro de Agricultura, quien hace algunos días conoció la estrategia realizada en China y firmó un convenio de cooperación para el manejo de herramientas con el fin de combatir la sequía, señaló que esta oportunidad servirá para “tener conocimientos y experiencias de ellos” y transformar la estrategia basada en la estimulación de precipitaciones en un proyecto permanente.
En la oportunidad, el intendente Sergio Gahona señaló “esperamos que este fin de semana- si las condiciones climáticas y si tenemos nubes susceptibles de ser estimuladas- podrían partir los primeros aviones, de los dos que vamos a tener acá, a estimular nubes”.
La segunda herramienta que está siendo incorporada por científicos del Centro de Estudios de Zonas Áridas (CEZA) de la Universidad de Chile, con apoyo de la Fundación para la Innovación Agraria (FIA), es la incorporación de frutos no tradicionales que requieren de poco recurso hídrico y son valorados en mercados extranjeros.
Las especies con las que actualmente se están experimentando, y que pueden ahorrar hasta un 85% de agua y energía, son: La tuna (roja y verde), la Pitahaya, el granado, la higuera y el tamarillo (o tomate chino).
Las plantas frutales estuvieron sometidas artificialmente en ambientes de extrema sequía, cuyos resultados pudieron determinar la capacidad de sobrevivencia en sectores que presentan menores niveles de agua.
El ministro, indicó que “aumentar la eficiencia en el uso del agua es primordial para la agricultura, sobretodo en una zona donde existe una escasez hídrica notoria” y agregó que “son estos proyectos de innovación que nosotros necesitamos para ser una potencia agroalimentaria de verdad”.