Guasave/México. La menor disponibilidad de agua para riego ha derivado que los agricultores mexicanos, al igual que en Chile, estén enfocados en adoptar nuevas tecnologías que se traduzcan en un ahorro del recurso, en mejores rendimientos y, conjuntamente, una mejor calidad de sus productos.
“Ahorrar agua es muy importante para nosotros, para enfrentar los años de escasez”, afirmó Víctor Cota, gerente de Producción Agrícola de Agroreservas, firma que destaca en producción de maíz, papas y ají (chile) con 2.600 hectáreas de terreno distribuidas en cuatro módulos de riego en el distrito de Sinaloa.
“Tenemos 650 hectáreas de papas con sistemas de riego por pivote, 400 hectáreas de maíz con riego por aspersión y 250 con riego por goteo. Además, estamos hace más de tres años trabajando con un sistema que es flexible en su operación y que facilita una gestión integral del riego (IrriModel) para mejorar los rendimientos y la calidad de nuestra producción”, agregó en el marco de una reunión desarrollada en México con ingenieros agrónomos de la Comisión Nacional de Riego (CNR) del Ministerio de Agricultura.
Felipe Martin, Secretario Ejecutivo de la CNR, sostuvo que es muy importante y valorable que las propias organizaciones de usuarios de agua adopten acciones que tengan como finalidad aprovechar las condiciones de sus terrenos y así aumentar su producción y competitividad. “Uno de los ejes priorizados por el Ministro de Agricultura, Luis Mayol, es justamente la modernización del sector, cuyo objetivo es optimizar la eficiencia en la distribución de nuestros recursos hídricos”, detalló.
En tanto, Víctor Dima, encargado de Buenas Prácticas Agrícolas de Agroreservas, señaló que es relevante incorporar un manejo sustentable de los recursos para lo que es fundamental “la aplicación del agua en el momento oportuno”.
El sistema IrriModel, desarrollado por el Instituto de Investigaciones Forestales, Agrícolas y Pecuarias de México (INIFAP), funciona a partir de un modelo integral para la programación, manejo y gestión del riego para diversos escenarios de disponibilidad de agua, precisa la calendarización y pronóstico del riego, a nivel de precio, para diferentes fechas de siembra y texturas de suelo.