Con el objetivo de promover la formación de una sociedad de lectores y lectoras, el Ministerio de Educación, el Consejo Nacional de la Cultura y las Artes, y la Dirección de Bibliotecas, Archivos y Museos se alinearon para desarrollar el Plan de Fomento Lector. Esta iniciativa integra diversas miradas sobre lo que significa leer y está dirigido a todos los habitantes del país, para lograr que se valore la lectura como instrumento que permite a las personas mejorar su nivel educativo, desarrollar su creatividad, sensibilidad y pensamiento crítico.
Es por esto que el seremi(s) de Educación, Enrique Silva, realiza un llamado a aprovechar estas vacaciones para fomentar la lectura en niños y niñas. “Es una buena oportunidad para que los papás y mamás, los abuelos y el entorno puedan promover la lectura a sus hijos y nietos, porque queremos una sociedad en que la lectura sea un instrumento que permita mejorar la calidad de vida y los aprendizajes” señaló Silva.
Junto a esto, agregó “Hay distintas alternativas para que podamos acceder a la lectura y una de ellas es una página a través de internet en donde pueden descargar recursos educativos e instrucciones para acceder a cuentos y libros durante este verano”.
Este portal web es www.leechilelee.cl, en donde se puede acceder a material descargable y gratuito que se puede revisar en familia como “Un cuento al día”, láminas de lecturas compartidas, audio cuentos y guías orientadoras de lectura para incentivar este hábito desde temprana edad.
Recomendaciones para padres con hijos pequeños
- Traten de leer juntos todos los días. Estos momentos compartidos con afecto, dejarán recuerdos especiales e imborrables en su vida.
- Un buen momento para la lectura es la hora de acostarse.
- A los niños y niñas les encanta volver a escuchar las lecturas. Léale el mismo libro, cuento o poema, una y otra vez, si ellos lo desean.
- Pregúntele acerca de lo leído: “¿Cuál era el problema que tenía el protagonista?”, “¿Cómo lo solucionó?”, “¿Cómo te habría gustado que terminara la historia?”.
- Invítelo también a dar su opinión: “¿Qué te pareció la actitud del gigante con los niños y niñas?”.
- Sugiérale que se imagine lo que Ud. le está leyendo.
- Dígale que “juegue a leer” los letreros y avisos de la calle.
- Motívelo/a a encontrar la(s) letra(s) que conoce en las cajas de alimentos, por ejemplo, pregúntele: “¿Dónde hay una “a”? ¿Cuántas encuentras?”. Eso lo ayudará a reconocer las letras y más adelante facilitará que aprenda a leer.
- Muéstrele lo útil y entretenido que puede ser saber leer. Por ejemplo, cocinando juntos una receta rica y leyéndola en voz alta, o escribiendo una carta juntos para algún amigo o familiar.
