El Gobierno estudia una reforma constitucional y una completa legislación para proteger los recursos de agua y los glaciares del país. La finalidad central será declararlos bienes nacionales de uso público. La modificación del Código de Aguas está en manos de una Delegada de Recursos Hídricos, que en junio próximo entregará sus primeras conclusiones a la Presidenta de la República. Lo anunciaron los ministros de Medio Ambiente y Obras Públicas, Pablo Badenier y Alberto Undurraga, al intervenir en el seminario “Progreso económico y Glaciares: ¿Es posible conjugar ambas esferas?” El encuentro, organizado por el Instituto Libertad, se realizó en el salón San Cristóbal, del Hotel Sheraton. En él también participó el profesor Mohan Munasinghe, Premio Nobel de la Paz 2007.
Al dar la bienvenida a los participantes, el presidente del Instituto Libertad, Roberto Ossandón, planteó: “La conservación del entorno, la promoción del desarrollo sustentable y el cambio climático, son asuntos que deben ser considerados, estudiados en profundidad y con suma urgencia por la sociedad en su conjunto. En eso debemos estar todos comprometidos. Existe consenso en vayamos desarrollando una nueva mentalidad, donde la meta no sea sólo producir a cualquier costo. La nueva mirada irá en beneficio de las personas”.
El ministro de Medio Ambiente, Pablo Badenier, recordó que existe legislación sobre el tema desde 1995. La más vigente data de 2009 y es la Estrategia Nacional de Glaciares. Afirmó que en este tema deben contribuir todos. Llamó a los sectores público y privado a elaborar a hacer sus aportes a un texto legal que proteja los glaciares, los cuales deben ser considerados reserva de agua a nivel mundial. El punto debe preocupar porque existen informes internacionales sobre un retroceso. Esto debe preocupar a Chile, que tiene el 75% de los glaciares de Latinoamérica.
Reconoció que el tema genera conflictos y es parte de la paz social. La desaparición de los glaciares deben ser una llamada de atención al país: “No es posible que haya falta de diálogo.
También sostuvo: “Es posible conjugar el progreso económico y las actividades productivas con la explotación de los glaciares. Para ello, hay que actuar con criterio técnico y objetivo, sin generar efectos significativos e irreversibles. Hay que investigar. – Los glaciares son fundamentales para la producción de agua. Tenemos que aunar esfuerzos con sentido de país para enfrentar el tema”. La Dirección General de Aguas trabaja para construir una Red Glaciológica de Impactos y Adaptación al Cambio Climático.
El ministro de Obras Públicas, Alberto Undurraga, informó que se estudia un título especial del Código de Aguas, a fin de proteger los glaciares. Recordó que los glaciares están en retroceso en todo el mundo. Lo preocupante es que en esto hay acción del ser humano y representan el 69% del agua de la Tierra. Chile tiene 26.641,6 kilómetros cuadrados de glaciares, en un total de 29.361,2 kilómetros cuadrados de Latinoamérica. . Y no se trata sólo del tema del agua, sino también de su influencia en el cambio climático.
En el seminario también intervinieron el profesor Alexander Brenning, de la Universidad de Waterloo y el glaciólogo Gino Casassa, investigador de la U. de Magallanes, quienes entregaron información técnica de gran interés sobre el tema.
PREMIO NOBEL
El profesor Mohan Munasinghe, Premio Nobel de la Paz, denunció que hay ambigüedad en la definición del tema de la intervención y política de glaciares. Se necesitan normativas más claras, una muy buena legislación
Sostuvo que lo relacionado con los glaciares tiene implicancias económicas, sociales y medio ambientales. Advirtió que, si la gente se preocupa sólo de producir y consumir, se puede originar una barbarización, porque se tendrá en cuenta las inequidades extremas que existen en el plano socioeconómico: “Los gobiernos y las organizaciones civiles deben trabajar en conjunto para impulsar una transición hacia la sustentabilidad. Debe haber mitigación y adaptación frente al sistema económico imperante, a fin de afrontar todas las necesidades simultáneamente: las económicas y las sociales y ambientales.
Llamó a los ciudadanos a prevenir el sobreconsumo. Advirtió sobre la excesiva dependencia que tiene Chile de la minería, lo cual lo convierte en un país vulnerable.
El seminario culminó con un debate, moderado por Antonio Horvath, director ejecutivo del Instituto Libertad. Participaron: Guillermo Pickering, presidente ejecutivo de la Asociación Nacional de Empresas Sanitarias; Carlos Urenda, gerente general del Consejo Minero; René Muga, vicepresidente ejecutivo de la Asociación Gremial de Generadores de Chile; Luis Mayol, ex ministro de Agricultura; Patricio Rodrigo, director ejecutivo de la Corporación Chile Ambiente; y Fernando Allendes, presidente de la Asociación Chilena de Energía Geotérmica.
