Con el objetivo de mejorar nutricionalmente la dieta de las especies que habitan en el parque Pedro de Valdivia de La Serena, es que se encuentra en marcha blanca la producción de forraje verde hidropónico, el cual no sólo aportaría mayores minerales y vitaminas a la alimentación de los animales, sino que además bajaría los costos de mantención al municipio.
Así lo dio a conocer el administrador del recinto, Fernando Torres, quien destacó el interés que ha tenido el edil Roberto Jacob, por recuperar y mejorar tanto las instalaciones del recinto, como el cuidado de las especies que allí habitan. “Esto obedece a una inquietud nuestra y del alcalde, de cómo mejorar la calidad de alimentación de los animales que acá tenemos. Conocimos estudios del INIA, tendientes a la producción de forraje verde hidropónico y nos propusimos replicar ese sistema de producción y ver qué resultados nos daba y por suerte el resultado fue positivo”, recalcó.
Cabe destacar que esto se trata de una comida complementaria. “Esto sólo viene a complementar la dieta, ellos necesitan otros nutrientes como fibras, por lo que la producción de forraje hidropónico aporta sólo el 50% de su alimentación diaria”, indicó Torres.
Trigo, avena y cebada son las semillas con las cuales ya experimentaron en el parque. Pero de qué se trata? Según lo expuesto, el forraje verde hidropónico es el resultado del proceso de germinación de granos de cereales, el cual se desarrolla en un período de dos semanas, captando energía del sol y asimilando los minerales contenidos en una solución nutritiva.
El proceso de producción está comprendido dentro de un concepto nuevo de producción, ya que no se requiere grandes extensiones de tierras, periodos largos de producción ni formas de conservación y almacenamiento.
MAYOR NUTRICIÓN A MENOR COSTO
Catorce días son los que demora en estar listo para el consumo animal desde el momento de la siembra hasta que está listo. “Los estudios señalan que a las dos semanas el forraje alcanza su mayor poder nutritivo, expresado en proteínas, ahí habría que darle a los animales este nuevo alimento”, explicó Torres.
A su vez, desde la administración se indicó que anualmente los animales consumen aproximadamente 7 toneladas de alimento y 365 fardos de alfalfa. “Ese es otro objetivo que nos hemos propuesto, que es disminuir costos y derivar el dinero a otros cuidados, para ello estimamos que se pueden reducir los gastos de alimentación a la mitad, lo que no es menor, además de entregar una dieta más equilibrada y sana”.
Cuyes, conejos, cabras, ovejas y hasta las gallinas disfrutaron del festín aprovechando todo, desde las raíces hasta los restos de semillas. Se estima que en aproximadamente un mes, estarían en condiciones de aumentar la producción.
