El mediodía de hoy, el cielo se vistió de rosa y celeste, luego que cientos de globos fueran lanzados desde el Faro Monumental de La Serena, en una actividad simbólica gestada por la Organización Sueño de Ser Padres, en conjunto con el municipio local.
Son cerca de treinta cuatro parejas que luchan por convertir en realidad el anhelo de convertirse en padres y agrandar la familia constituida. Conscientes de que están frente a un problema de salud, la iniciativa busca concientizar sobre la importancia del problema de infertilidad, tema de salud que aqueja a un gran porcentaje de la sociedad.
“Enviamos un globo al cielo con el deseo der padres. Cada una de las parejas le pidió a Dios o a un ser supremo, que nos conceda el sueño de ser padres, algo que algunas hemos esperado por muchos años”, indicó al respecto Verónica Campos, coordinadora de la organización, que funciona bajo el alero de la Corporación Queremos Ser Padres.
Por su parte, el alcalde Roberto Jacob, quien llegó acompañado de los concejales Pablo Yañez, Jorge Hurtado y posteriormente se sumó Robinson Hernández, indicó que “en estos dos años de alcaldía he asistido a muchas actividades simbólicas, pero creo que ésta es una de las más emotivas y significativas. Estamos apoyando a un grupo de parejas que buscan y luchan por un sueño que es el de ser padres, un anhelo de toda la familia. Hay que considerar que esto no sólo les pasa a ellos, sino a muchas familias, por lo que el Estado debería hacerse cargo, estamos frente a un problema de salud y hay que ir incorporándolo. Les decimos a estas familias que estamos para apoyarlos y que sigan luchando por este sueño, nosotros nos llevamos la tarea para la casa, que es concientizar a las otras autoridades sobre este tema”, puntualizó el edil.
De la misma manera, Pamela Vásquez, quien gracias a la ayuda de prestigiosos ginecólogos se encuentra embaraza de dos meses y medio, también hizo un llamado al Estado para que se haga cargo de esta problemática. “Queremos hacer un llamado al Estado para que apoye temas de alta complejidad y se haga cargo de ellos. Hoy en día hay sólo ocho cupos a nivel regional y somos más de treinta parejas que tienen un sueño común que es el de ser padres. Con mi marido luchamos más de dos años para ser padres y hoy, gracias a esa perseverancia y apoyo, estoy embarazada de dos meses y medio”, señaló.
Finalmente, y en medio de las lágrimas, Mónica Díaz y Gerardo Toledo, cómo su globo volaba lejos, llevando consigo la petición más importante de sus vidas: que intercedan para que puedan convertirse en padres. “Esta es una actividad que nos une como parejas y como hombres y mujeres. Muchos de nosotros tenemos varios obstáculos que vencer, como por ejemplo el tema de la edad. Por infinidad de cosas que suceden se van aplazando el tiempo y los periodos de hacerse el tratamiento, entonces mientras más largo es el periodo más difícil es para la pareja, la presión del tiempo, la presión de las emociones, el desgate intelectual, emocional y físico que uno tiene es grande pero este tipo de actividades ayudan muchísimo, porque te llenan de energía el alma”, explicó.