La Cámara Nacional de Comercio, Servicios y Turismo de Chile (CNC) manifestó su inquietud por las consecuencias que podría generar el paro de 24 horas anunciado por los funcionarios de la Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC) para el próximo martes 15 de septiembre, afectando el normal funcionamiento de 12 terminales aéreos del país.
El presidente de la CNC, Ricardo Mewes, afirmó que “nos preocupa el impacto de esta paralización en las operaciones de tránsito aéreo. Si bien las demandas de los trabajadores pueden ser muy legítimas, éstas no pueden afectar el bien común. Durante estas fechas, previa a la celebración de Fiestas Patrias, viajan a diario aproximadamente 70.000 pasajeros, quienes se verían directamente afectados por la alteración de servicios en los aeropuertos, desde los cuales no podría despegar ningún avión”.
Además advirtió que “cerca de 670 toneladas de carga son transportadas al día en vuelos nacionales e internacionales, por lo que también se afectará el normal funcionamiento de las operaciones de importación y exportación, viéndose interrumpidos los flujos de insumos y productos”.
Añadió que los principales aeropuertos que se verían perjudicados serían el de Santiago, que concentra el 98% de pasajeros internacionales y el 45% de nacionales. A éste se suma Antofagasta (11%), Calama (7%), Puerto Montt (6,5%), Iquique (6%) y Concepción (5%).
El líder del gremio recordó, que según lo dispuesto en el artículo 127 del Código Aeronáutico, ante una situación de fuerza mayor, como sería este paro, tanto la compañía aérea como los pasajeros, pueden dejar sin efecto el contrato. “Esto se traduce en que las compañías pueden optar por devolver lo pagado por el ticket, así como los usuarios, solicitar el reembolso de éste, sin que se les aplique multa. En caso de que ambas partes estén de acuerdo, se puede reagendar el vuelo. Sin embargo, en cualquiera de estas situaciones, las compañías aéreas no tienen la obligación de prestar asistencia extra a los pasajeros, como comida, hospedaje o traslado”, explicó.
Mewes instó a que se propicie un clima de entendimiento y diálogo entre los funcionarios de la DGAC y el Gobierno, de manera que puedan llegar a un acuerdo y, en su defecto, se establezcan los respectivos planes de contingencia para minimizar las consecuencias de esta paralización.