Con un amplio apoyo, la Cámara Baja aprobó y envió al Senado el proyecto que regula los servicios sanitarios rurales, iniciativa que –según lo explicó el diputado Sergio Gahona- “representa una solución a una necesidad latente de muchas comunidades rurales de nuestra región”.
“Es un proyecto muy significativo para nuestras comunidades, ya que se hacía necesario resolver este ámbito tan básico como es el suministro de este vital elemento en condiciones adecuadas y de calidad”, dijo Gahona.
El parlamentario explicó que la propuesta busca formalizar y apoyar el trabajo de los Comités de Agua Potable Rural debido a los beneficios que estos entregan a sus comunidades, estableciendo una serie de adecuaciones a los programas de Agua Potable Rural (APR) que en la actualidad benefician a más de 1.700.000 personas.
“La idea es fortalecer la capacidad de gestión de estas organizaciones, estableciendo una serie de derechos y obligaciones entre los socios y usuarios de un servicio sanitario rural. Asimismo, se protegerán los territorios atendidos por estas organizaciones comunitarias y se definen los tipos de servicios según el propósito de las actividades a las que sea destinado el suministro, esto puede ser consumo doméstico o actividades productivas y agrícolas”, manifestó.
Y agregó: “Con el fin de mantener un correcto suministro, cada cinco años se realizará una evaluación según la calidad del agua y la continuidad del servicio, entre otros aspectos contemplados en el proyecto”.
“Entregar este suministro es una labor que le corresponde al Estado, porque mejorar el suministro de agua potable es mejorar la calidad de vida de las personas. El proyecto es positivo y lo apoyamos, sobre todo por la importancia que tiene para comunidades rurales y sectores alejados, donde hay ausencia de un mercado o empresas que se hagan cargo formalmente de este asunto”, finalizó Sergio Gahona.