Pasaron más de ocho meses hasta que, por fin, la Asociación de Industriales y Armadores Pesqueros de la Región de Coquimbo (AIP) pudo regresar a sus propias oficinas en Costanera 900, Coquimbo. Desde hace algunas semanas la entidad se encuentra nuevamente ocupando su sede, junto al muelle industrial, la cual fue arrasada por el maremoto del 16 de septiembre pasado.
El inmueble, conformado por dos módulos tipo contenedor, fue arrancado de cuajo desde sus bases por el mar en la fatídica jornada, y luego lanzado sobre la calle, junto a numerosas embarcaciones de pesca, tanto industriales como artesanales. Desde entonces la AIP funcionó en la sede de la Asociación Gremial de Tripulantes y Mujeres de Plantas Pesqueras, en una casa de propiedad del Departamento de Educación de la Municipalidad de Coquimbo.
Las reparaciones, compra de nuevo mobiliario y material de oficina, así como la construcción de un nuevo cierre perimetral, se ejecutaron mediante un aporte económico del gobierno, canalizado a través de Corfo y su agente operador Codesser.
