Se acercan las Fiestas Patrias y los símbolos de Chile están en todas partes. Uno de ellos es el copihue, declarado como flor nacional el 24 de febrero de 1977, por Decreto Supremo N° 62 del Ministerio del Interior.
La Premio Nobel Gabriela Mistral describió al copihue como “golpes de color” y “gnomos en medio del bosque”. Y no se equivocaba. Es un sub arbusto trepador perenne, de tallo voluble y hojas gruesas, con forma acorazonada. Sus flores colgantes de hasta siete centímetros de largo contienen seis tépalos que suelen ser casi idénticos.
“El copihue es una planta trepadora que crece en su estado natural debajo de las copas de otros árboles de mayor altura, como el coigüe, el roble, el notro y el raulí. Por ende, sus flores se perciben como escondidas, tímidas y elegantes”, describe Carmen Gloria Pizarro, secretaria de estudios de la carrera de Agronomía de la Universidad del Pacífico.
La llamativa flor tiene un periodo de floración relativamente prolongado, en las estaciones de verano y otoño. “Si bien esta planta presenta floración de otoño, de marzo a mayo, produce también flores solitarias durante el verano, que presentan colores rojo, rosado o blanco, existiendo algunos ejemplares jaspeados o variegados que mezclan entre estos colores”, explica la ingeniera agrónoma.
El copihue es la única especie del género Lapageria y sólo existe en Chile en estado silvestre. Ha sido declarado en peligro de extinción debido a la paulatina tala de los bosques. Es por eso que ver la flor nacional es difícil y más aún tenerla en el jardín.
“El copihue presenta dificultad al cultivarlo, en parte por su reacción de forma muy sensible a excesos de sequía como de humedad, ya que sus raíces se secan o se pudren rápidamente. Además de sus raíces sensibles, es necesario procurarles una buena ventilación”, describe la experta.
Cinco tips para tener un copihue en el jardín
Carmen Gloria Pizarro, secretaria de estudios de la carrera de Agronomía de la Universidad del Pacífico, entrega los siguientes consejos para tener un copihue en nuestro jardín.
1. Plantar un copihue es una tarea desafiante. En condiciones de máxima asepsia, se debe elegir una rama, realizarle una pequeña herida y, luego, para estimular el enraizamiento, aplicar una auxina (sustancia que estimula el crecimiento vegetal). Esta se debe ubicar en una maceta con un sustrato inerte, es decir, en arena de rubia o de río lavada.
2. Otra forma es hacerlo mediante semillas. En este caso, se deben recoger frutos frescos, privilegiando un fruto recién cosechado. Luego lavar las semillas, eliminando el mucílago que las recubre. Se logra una alta germinación sembrando estas semillas en un sustrato compuesto de 50% de tierra de hojas y 50% de arena, cubriéndolas con una capa de alrededor de 1 cm. de esta mezcla.
3. El copihue en su hábitat silvestre recibe un 20% de la luz del exterior, por lo tanto se debe tratar de reproducir este ambiente. Para su cultivo se recomienda localizarlos en un lugar bajo un alero, o dentro de un invernadero o patio interior techado, ya que siempre se deben evitar las corrientes de aire. Si sólo tiene un espacio donde la planta recibirá el sol directo, encárguese que solo lo reciba en la mañana y en una orientación sur. El copihue es una planta sensible; puede soportar heladas de hasta -4ºC, pero no se adapta bien a los veranos secos.
4. Si desea plantar el copihue en una maceta, utilice un sustrato liviano y que tenga un buen drenaje. También puede hacer una mezcla de arena rubia o de río (no más allá de un 15%) con tierra compostada. Asegúrese de incorporar periódicamente materia orgánica descompuesta.
5. El copihue prefiere suelos ácidos. Como es una planta trepadora, asegure un tutor (árbol más grande) y guíe a la flor nacional cada vez que observe brotación. Es importante ubicar el tutor al momento de colocar la planta en la maceta. Si entierra el tutor posteriormente al establecimiento de la planta, éste romperá raíces.
6. Preocúpese de que no le falte agua, que nunca se seque. Evite regar con agua calcárea, pues esta otorga un pH básico, todo lo contrario a la acidez deseada para el copihue.