Tras completar con un alto grado de satisfacción la auditoría a las plantas de procesamiento de crustáceos ubicadas en Coquimbo y Quintero, la industria pesquera dedicada a la explotación de crustáceos demersales se encuentra a las puertas de recibir una nueva certificación en el estándar Marine Stewardship Council (MSC), esta vez a la “cadena de custodia”, esto es, la trazabilidad de los productos.
Se trata de un nuevo esfuerzo encabezado por la Asociación de Industriales y Armadores Pesqueros de la Región de Coquimbo (AIP), luego que en septiembre pasado se obtuviera la certificación de sustentabilidad MSC para las pesquerías de camarón nailon, langostino amarillo y langostino colorado. Con este segundo paso se entregará una garantía de confianza a los compradores y los consumidores finales, en términos que el producto que están adquiriendo corresponde exclusivamente a capturas efectuadas por embarcaciones certificadas en pesca sostenible, y en ningún caso de naves que no respeten ese estricto protocolo.
El proceso de inspección de plantas comenzó el 28 de noviembre, a cargo del auditor Fernando Tapia, de la certificadora internacional SGS, Consideró las instalaciones de las empresas Antartic Seafoods, Bracpesca, Guidomar y Rymar, todas ellas en Coquimbo, más la planta de Pesquera Quintero, en la Región de Valparaíso. Los informes resultantes ya están siendo entregados, por lo que la nueva certificación podría quedar asegurada incluso antes de fin del año 2016.
El gerente de AIP, Leandro Sturla, destacó que “el proceso está en desarrollo, ya se cumplieron las visitas a cada una de las empresas involucradas, en el entendido que cumplieron las exigencias que se les solicitaron. Ahora se está en el desarrollo de los informes para cada una de las empresas. Si se levantan observaciones en alguna de las plantas, de que está pendiente algún tipo de procedimiento, las empresas tienen posibilidad de implementarlo dentro de un plazo de razonable para que efectivamente puedan calificar dentro de la normativa. El concepto fundamental en la cadena de custodia es poder dar la garantía de trazabilidad del producto, de que por ningún motivo se pueda mezclar materia prima procedente de flotas certificadas con materia que tengan una procedencia distinta. Las plantas deben tener todos sus registros implementados”.
De conseguirse esta segunda certificación, los productos podrán optar a venderse en las salas de todo el mundo luciendo el sello azul de sostenibilidad que otorga MSC.
VEDA DE LANGOSTINOS
En otra materia, el personero agregó que ya se está llegando al término de la temporada de capturas de langostino colorado y langostino amarillo, especies que entrarán en veda durante los meses de enero y febrero.
Al llegar a un nuevo fin de año, se aprecia que, en general, se mantiene la tendencia a la estabilidad en las poblaciones de las tres pesquerías de crustáceos demersales, las cuales permanecen desde hace largos años entre las más sustentables del país.