La inversión en construcción cerraría 2016 con una caída de 0,2% en doce meses, mientras que en 2017 registraría un retroceso de 0,1% en comparación con el presente año, según dio a conocer la Cámara Chilena de la Construcción (CChC) durante la presentación “Balance 2016-Proyecciones 2017” que el gremio realizó a partir de los datos de su informe Macroeconomía y Construcción (MACh).
Sergio Torretti, presidente de la CChC, sostuvo que “de concretarse el escenario que prevemos como más probable para 2017, sería el tercer año consecutivo en que la inversión sectorial se mantendría estancada. Y esto es preocupante no solo por el impacto que tiene en nuestra industria, sino también porque es una clara manifestación de la debilidad de la economía y del estancamiento de las decisiones de inversión, factores que en su conjunto afectan la trayectoria de crecimiento futuro del país”.
“De ahí que nuestro principal mensaje sea que los distintos actores sociales debemos hacer nuestro mayor esfuerzo para mejorar los niveles de confianza y que el crecimiento económico vuelva a ser un objetivo prioritario compartido”, agregó el dirigente gremial.
Por su parte, el gerente de Estudios de la CChC, Javier Hurtado, explicó que “en lo que respecta al año 2016, el resultado es coherente con la caída de la inversión en infraestructura, que cerraría el año con un retroceso de 1,8% en doce meses, lo que no logró ser compensado por el aumento de 3,4% anual de la inversión en vivienda, que continuó activa por efecto del interés de las inmobiliarias por satisfacer la demanda generada por la entrada en vigencia del IVA a la vivienda y los nuevos planes habitacionales impulsados por el Gobierno”.
Hurtado añadió que “en la construcción está aumentando el desempleo -que cerrará el año en torno a 9%- y disminuyendo la calidad del empleo, lo que queda en evidencia por el incremento significativo de los trabajadores por cuenta propia. En 2017 el desempleo sectorial seguirá avanzando, hasta superar levemente el 10%, pues creemos que un porcentaje de los trabajadores por cuenta propia intentará volver a encontrar empleo formal habiendo menos plazas de trabajo”.
2017: Subsector Infraestructura
El crecimiento de 1,3% de la inversión en infraestructura pública proyectado para 2017 se explica porque el presupuesto de inversión del MOP para el próximo año registra un incremento real anual de 2,2%, producto de la base de comparación menos exigente que generó un ajuste fiscal realizado en marzo de este año al presupuesto original de inversión de esa cartera.
En materia de concesiones, para 2017 se estima una inversión de US$763 millones, lo que es un incremento marginal de flujos que se explica por el inicio esperado de los proyectos embalse Punilla y Américo Vespucio Oriente (tramo El Salto-Príncipe de Gales).
En lo que respecta a la inversión infraestructura productiva privada, el próximo año esta llegaría a US$12.003 millones, de los cuales US$6.247 millones corresponderían a gasto en construcción. Así, 2017 sería el tercer año consecutivo en que caería la inversión productiva privada.
“Si la inversión en infraestructura pública y privada está a la baja, y de verdad se aspira a reactivar la economía, lo razonable sería dar un reimpulso decidido a las concesiones y, con ello, dar señales claras respecto de la importancia de que el país retome la senda de crecimiento cuanto antes”, comentó Torretti.
2017: Subsector Vivienda
Para el próximo año se observa una importante disminución de los recursos destinados a programas de vivienda pública dirigidos a sectores vulnerables, lo que contrasta con la fuerza que están adquiriendo programas de integración, como el DS 116 y el DS 19.
En cuanto a la vivienda privada, su nivel de venta en 2017 será similar al de este año, que cerrará con una contracción cercana a 40%, lo cual desincentivará la inversión en esta área y la incorporación de un número significativo de nuevos proyectos.
Al respecto, el presidente de la CChC dijo que “en el contexto de un mal año, destaco la gestión del Gobierno por extender el plazo para solicitar a las direcciones de obras municipales la aprobación final de proyectos ejecutados para quedar exentos del pago de IVA a la vivienda. Sin embargo, para la actividad inmobiliaria sigue siendo crítica la falta de planificación urbana y de suelo normado que esto genera y que traba potenciales proyectos de inversión”.