Cuando vea su primera luz en 2024, el telescopio de 39 metros ELT (Extremely Large Telescope, telescopio extremadamente grande) de ESO será el telescopio más grande de su tipo jamás construido. Con la fabricación del espejo secundario del telescopio (M2) acaba de lograrse un nuevo hito, ya que es más grande que muchos espejos primarios de muchos telescopios de investigación actuales.
El bloque del espejo es la pieza de material fundido — en este caso vitrocerámica Zerodur® — que posteriormente será desbastado y pulido para producir el espejo acabado. En enero de 2017, ESO adjudicó a SCHOTT el contrato para fabricar el bloque del espejo M2 (eso1704). ESO ha disfrutado de una fructífera colaboración con SCHOTT, que también produjo los espejos principales de 8,2 metros para el VLT (Very Large Telescope), instalado en el Observatorio Paranal de ESO (ann12015). La empresa SHOTT, fabricante de productos astronómicos excepcionales de alta calidad, ya ha entregado los bloques de los espejos delgados deformables que compondrán el espejo cuaternario de ELT, M4 (ann15055) y también proporcionarán el bloque del espejo terciario M3.
A lo largo del próximo año, el bloque del espejo secundario tiene que pasar por un lento enfriamiento, un proceso de mecanizado y una serie de tratamientos térmicos. Entonces será desbastado para darle la forma adecuada y luego será pulido. La compañía francesa Safran Reosc se hará cargo de este proceso, además de llevar a cabo pruebas adicionales (ann16045). La forma y el pulido dados al bloque tendrán una precisión de 15 nanómetros (15 millonésimas de milímetro) en toda la superficie óptica.
Cuando se termine y se instale, el espejo M2 colgará boca abajo sobre el gran espejo primario del telescopio. Este espejo secundario constituye el segundo elemento del nuevo sistema óptico del ELT, formado por cinco espejos. Será asférico, tendrá una forma curvada muy pronunciada y tanto su fabricación como sus pruebas suponen un gran desafío.