La próxima instalación de cámaras de video en los barcos de pesca industrial, como parte de un sistema de fiscalización de los descartes, es uno de los próximos desafíos técnicos del sector. Los armadores y jefes de flota de la Asociación de Industriales y Armadores Pesqueros (AIP) participarán en un taller sobre la materia, a realizarse este jueves 3 de agosto en Coquimbo.
La pesca en Chile se apronta a dar un nuevo paso en la búsqueda de la sostenibilidad ambiental y económica, mediante la instalación de cámaras de video a bordo de los barcos de pesca industrial, como parte de un sistema de fiscalización de los descartes pesqueros, esto es, los ejemplares de especies marinas que no son objetivo de captura y que, en forma accidental, quedan atrapadas en las artes de pesca por compartir los mismos hábitat. En el caso de las pesquerías de crustáceos demersales de Coquimbo –camarón nailon, langostino amarillo y langostino colorado–, tales descartes se dan en una baja proporción, gracias a una serie de mejoras tecnológicas y la incorporación de buenas prácticas en el último quinquenio.
Este será el tema de una reunión de trabajo organizada por el Servicio Nacional de Pesca y Acuicultura, en la cual participarán las distintas empresas asociadas a la Asociación de Industriales y Armadores Pesqueros de la Región de Coquimbo (AIP), como también los crustaceros de la Región de Valparaíso, incluyendo tanto a los armadores como a jefes de flota y representantes de gremios de la pesquería de crustáceos. La actividad está programada para el jueves 3 de agosto, a partir de las 9:00 horas, en la sala multiuso del Centro Cultural Palace de Coquimbo.
La reunión se enmarca una política de diálogo entre Sernapesca y las asociaciones de armadores, por tipos de flotas, con el fin de dar a conocer aspectos técnicos del nuevo sistema y, a la vez, captar información y opiniones del sector extractivo industrial. Todo ello con el objetivo de lograr la mejor implementación posible de estas medidas.
El gerente de AIP, Leandro Sturla, destacó que la incorporación de cámaras viene a continuar anteriores medidas en el mismo sentido, las que comenzaron con la toma de registros en faena, mediante observadores científicos independientes embarcados en las naves pesqueras y bitácoras de descartes a cargo de los capitanes de barcos. “La industria crustacera, en este sentido, se ha destacado por ser muy proactiva. Siempre hemos estado dispuestos a apoyar a las autoridades. Esta fue una de las primeras pesquerías que, junto con la de merluza, partieron implementando el sistema de observadores a bordo, y el establecimiento de bitácoras de descarte que son reportadas por los patrones o capitanes a la autoridad en las horas siguientes a hacer la maniobra de pesca. Esto va a introducir una complejidad mayor, que sin embargo, se va a traducir en tener mejores datos de nuestra pesquería, de las especies que se capturan. Y por lo mismo, debiera redundar positivamente en la sustentabilidad de nuestras pesquerías”, afirmó.
Leandro Sturla, gerente de la Asociación de Industriales y Armadores Pesqueros de la Región de Coquimbo (AIP).
