La fiesta de Halloween es una instancia que se presta para que los niños consuman un alto nivel de azúcar y, lo más importante, es que lo hacen durante todo el día, ya que en muchos casos los adultos no tienen un control sobre esto.
Hay que ser consciente de que los alimentos con azúcares refinados (glucosa, fructosa y sacarosa) además de los hidratos de carbono pueden provocar lesiones de caries. Es por esta razón que Rebeca Tapia, Cirujano Dentista de Clínica Universidad de los Andes indica que “los dulces y golosinas en general, deben ser consumidos ocasionalmente y en caso de consumirlos, deben ingerirse junto a las comidas principales (almuerzo o cena) y si esto no es posible, siempre debe existir cepillado de dientes posterior a su consumo”.
Si no existe una buena higiene bucal todos los dulces provocan daño, sin embargo, las calugas, chicles y masticables, al ser más difíciles de limpiar, ya que se adhieren a los dientes, podrían permanecer más tiempo en la boca provocando caries.
Por su parte, la principal recomendación que entrega la Dra. Claudia Naranjo, Odontopediatra de Clínica Universidad de los Andes “es que para evitar el desarrollo de caries dental es necesario evitar la ingesta de dulces, tener una buena higiene bucal y asistir periódicamente a controles odontológicos para recibir tratamientos preventivos”.