- El programa partió en octubre de 2014 para responder a la falta de trabajo en la región producto de la sequía. Las municipalidades han planteado incertidumbre, ya que el gobierno saliente solo aseguró financiamiento hasta marzo de 2018.
Con una inversión superior a los $200 millones de pesos con recursos regionales, marzo de 2018 fue el último mes asegurado por el gobierno saliente en el programa de generación de empleos de emergencia. Se trata de una herramienta desarrollada en 2014 y financiada inicialmente -y hasta febrero de 2018- con recursos del Ministerio del Trabajo, para responder al importante desempleo producido por la sequía.
Son más de 1.170 los empleos generados por esta vía en el último mes de programa, en un trabajo directo con las municipalidades. A poco de la fecha de término, los alcaldes han expresado su preocupación, pues la administración anterior no se pronunció sobre su continuidad ni financiamiento posterior.
La Intendenta Lucía Pinto señaló que “teniendo en manos los antecedentes, hoy estamos trabajando en buscar una pronta solución a la incertidumbre que nos han planteado las municipalidades sobre la continuidad de los programas de pro empleo. Le pido a los alcaldes que tengan paciencia, hoy estamos elaborando las soluciones, considerando las diferentes variables sociales y económicas y en conocimiento del estancamiento económico en que recibimos nuestra región”.
La autoridad regional agregó que el Gobierno está poniendo especial atención en esta situación, pues quienes ocupan estos puestos de trabajo son principalmente jefas y jefes de hogar de las familias más vulnerable de la región, tanto en zonas urbanas como rurales de la región de Coquimbo.
Por su parte, el Seremi de Trabajo, Matías Villalobos, recordó que “técnicamente este programa de pro empleo debía terminar en febrero por el financiamiento del gobierno central, sin embargo, el Gobierno Regional anterior financió hasta marzo de este año. Considerando la situación de estos empleos, la Intendenta Lucía Pinto nos instruyó revisar la continuidad del mismo y elaborar un proyecto para extenderlo por al menos cinco meses más, mientras buscamos soluciones a mediano y largo plazo para la generación de empleo en la región”.
El secretario regional de Trabajo agregó que entre los elementos considerados en esta evaluación, están las cifras de empleo recientemente entregadas por el Instituto Nacional de Estadísticas (INE), las que son auspiciosas para la región de Coquimbo, arrojando una desocupación del 5,8%, es decir, una disminución de 2 puntos en 12 meses.
El secretario regional de Trabajo insistió en que “este programa genera empleos de emergencia, empleos de media jornada, con una remuneración de la mitad de un ingreso mínimo, lo que no es lo que este Gobierno espera respecto de la generación de empleo. Además son trabajos de emergencia que responden a una situación particular, de un momento determinado, por lo que no se pueden prolongar por un periodo de tiempo muy largo, sino ya no serían empleos de emergencia”.
Los empleos generados a través de este programa responden a proyectos ejecutados por las quince municipalidades de la región, las que contratan personas principalmente para trabajos en aseo y ornato y apoyo administrativo, hoy en empleos de media jornada.
