Un llamado a denunciar los casos de robo de cables conductores de la red eléctrica realizó CGE a la comunidad ante el aumento de este tipo de delito que se ha registrado durante los últimos meses en la Región de Coquimbo.
Desde mediados de 2018 se han generado cuatro eventos en la Región de Coquimbo. Las comunas que han sido afectadas son Andacollo, La Serena, Ovalle y Combarbalá, considerando hurto de 8.525 metros de red y 8.941 familias sin energía. El caso más preocupante se generó el 18 de diciembre, en el sector de las Compañías, donde personas ajenas a la compañía accedieron a una cámara subterránea de media tensión, interviniendo las instalaciones sin autorización, lo que provocó que más de 8.000 familias fueran afectadas por un corte de suministro.
El robo de cables o conductores eléctricos es un delito, y como tal puede ser perseguido penalmente ante la justicia. Además, la manipulación de las instalaciones por personal no autorizado es un peligro para la seguridad de las personas y la continuidad del suministro.
A nivel industria, el 13% del total de interrupciones de suministro es provocado por accidentes en las líneas, como choque a postes, robo de conductores o intervención de las instalaciones por parte de terceros no autorizados. Esta es casi la misma proporción de interrupciones causada por los eventos climáticos, como el viento y la lluvia.
Cómo acciones inmediatas en cada caso se han generado las denuncias correspondientes con el fin de seguir acciones legales. Adicionalmente, el día 19 de diciembre, se sostuvo reunión de trabajo con Carabineros para revisar todos los detalles del caso y se ha mantenido constante comunicación y coordinación con todos los participantes de la Mesa Regional de Robo de Conductores, entre los cuales participa: Seremi de Energía, Superintendencia de Electricidad y Combustibles, PDI, Fiscalía, Carabineros, SII, Empresas Eléctricas, entre otros.
Actualmente, se está gestionando la presentación dentro de los próximos días de una querella, la cual está siendo estudiada y redactada por la fiscalía de CGE.
El Gerente Zonal de CGE Coquimbo, Pablo Salinas, afirmó que “el robo de conductores afecta a toda la comunidad, ya que provoca interrupciones en el suministro eléctrico y puede afectar la seguridad de las personas, causando accidentes, incluso con resultado de muerte, para las personas que manipulan las instalaciones sin autorización. Hacemos un llamado a la comunidad a denunciar cualquier intervención no autorizada en las instalaciones, con el fin de minimizar el riesgo a las personas”.
De la misma manera, CGE reitera que en estos casos ha sido fundamental la coordinación con las autoridades para implementar soluciones que permitan disminuir los accidentes e interrupciones de suministro derivadas de la intervención no autorizada en las redes o el robo de conductores. “Creemos que este trabajo se debe fortalecer cada día más, ya que nuestra principal preocupación es la seguridad y calidad de servicio para nuestros clientes”, explicó Pablo Salinas.
Por su parte el Seremi de Energía, se refirió a los últimos acontecimientos indicando “Para nosotros como Gobierno y de la mano de nuestra Intendenta Lucía Pinto, garantizar la calidad de un buen servicio ha sido un hecho relevante. Por eso desde abril de 2018 levantamos la mesa de robo de cable conductor, porque entendemos que más que entregar la empresa el suministro a la población, en realidad es cumplir con lo básico y necesario para cada una de las familias, recordando que existen personas para quienes la continuidad de la energía eléctrica es fundamental para sus vidas”.
CGE entrega permanentemente en reuniones con juntas de vecinos y organizaciones sociales mensajes tendientes a informar y generar conciencia sobre los riesgos asociados al hurto de electricidad y el robo de cables.