Las redes sociales pueden ser un gran aliado a la hora de buscar trabajo, sobre todo, en tiempos de pandemia, cuando las cifras de desempleo en el último trimestre de este año superan los dos dígitos, pero así también se aprecia un avance tanto en el empleo como en la fuerza de trabajo al comparar con los resultados de junio de acuerdo a cifras de la Universidad de Chile.
Por eso se vuelve relevante lograr sacar partido a plataformas como LinkedIn que dan una mano en este aspecto. Lo primero que hay que entender, según Lorena Montespier, People Manager de Nawaiam, es que esta red social es un complemento, no un reemplazo.
“Si bien LinkedIn permite a las personas obtener un volumen muy alto de visualizaciones de sus publicaciones y, por ende, más postulaciones, el CV bien realizado es muy enriquecedor y ayuda a los selectores a contar con mayor información”, expresa la especialista.
Luego, es importante trabajar la marca personal de manera que logre el objetivo que se traza cada candidato. En ese sentido, Montespier comenta “si realmente quieres que sea un trampolín para tu personal branding tienes que saber diferenciarte y transmitir claramente cuál es tu propuesta de valor profesional; es decir, qué puedes aportar profesionalmente hablando: ¿por qué deberían elegirte a ti? ¿qué te diferencia de otros profesionales?”.
Así, dice, el postulante puede generar recomendaciones y validaciones que contribuyan con publicaciones interesantes de contenido propio y añadan valor. “La interacción es clave y, por supuesto, una red de contactos de valor que permita generar debates interesantes serán valores fundamentales para tener éxito”, subraya.
En este punto surge la pregunta de cómo ampliar justamente esta red para optimizar la búsqueda de esa vacante deseada. Al respecto, la ejecutiva de Nawaiam enumera una serie de tips: “antes que todo, es vital crear un perfil con una buena portada atractiva ya que es tu carta de presentación; el título del perfil debe ser conciso y concreto, actualizado en general como se encuentra el mercado; si la persona cuenta con un sitio web de una empresa o un blog personal tiene que incluirlo, vale oro!; el extracto es casi la frutilla del postre, habla de qué buscamos, nuestros logros, nuestras competencias…todo; las aptitudes y validaciones ayudan a que uno no sólo se venda, sino que otros nos recomienden y eso, sin lugar a dudas, está muy bien visto”, puntualiza.
Lo que no se debe hacer
Montespier también pone énfasis en aquellos errores que se cometen por armar rápidamente el perfil, pero que afortunadamente con corregibles fácilmente.
El no insertar una foto actualizada y cuidada, el no redactar un extracto sincero pero atractivo como tampoco brindar detalles de las actividades realizadas en cada uno de los trabajos son ejemplos de equivocaciones que se cometen, detalla.
“Otro error es que las publicaciones, comentarios y/o debates no agreguen valor o claramente sean despectivos, negativos o espacios de quejas. LinkedIn bien utilizado te ayuda a acceder a un universo de profesionales que no sólo podrán ayudarte y recomendarte para encontrar tu trabajo soñado, sino que te permitirá realmente aprender constantemente, hacer networking y no dejar de ser cercano a pesar de las distancias con miles y miles de personas. Nuestro aporte correcto generando valor y siendo parte de un intercambio de ideas entre miles de personas nos harán únicos y crearán sin dudas, nuestra marca personal, nuestro diferencial”, complementa.
Por el lado de las empresas, la ejecutiva de Nawaiam recomendó usar LinkedIn ya que “proporciona un contacto directo con los posibles candidatos y permite rápidas visualizaciones de la publicación y rápidas recomendaciones. Hoy LinkedIn no es sólo una base de personas, hoy permite hacer Networking desde cualquier lugar del mundo”.