Un reciente estudio publicado en la Revista Springer, en Suiza, advierte que el Síndrome de Apnea/Hipopnea Obstructiva del Sueño (SAHOS) podría ser un factor de riesgo si se contrae Covid-19, por lo que mantener bajo control médico los efectos de este síndrome del sueño, puede ser beneficioso para disminuir los riesgos del Covid-19 en caso de padecerlo.
Este es un tema que afecta a gran parte de los chilenos pues, según datos del 2017 de la Revista Chilena de Enfermedades Respiratorias, casi un 20% de la población chilena tiene apnea del sueño como condición base de salud. Además, de acuerdo a cifras de la última Encuesta Nacional de Salud, un 63% de la población adulta ronca, condición que en la mayoría de los casos deriva de SAHOS.
Al respecto, la broncopulmonar Maury Bracho, de Clínica Somno, señala que “los episodios de apnea del sueño ocurren principalmente por una estrechez en la faringe, lo que puede producir un flujo turbulento, que desencadena ronquidos o que se obstruya el paso del aire durante el sueño. Esto, sumado al covid-19 podría aumentar el desencadenamiento de otras enfermedades como hipertensión, arritmias cardiacas, infartos cardiovasculares, entre otros”.
Actualmente se sabe también, gracias a un estudio publicado por la revista CHEST en 2009, que el 88% de los pacientes con Fibrosis Pulmonar Idiopática tienen SAHOS. Estos conocimientos llevan a los científicos a plantear que los pacientes que sufrieron un caso severo de Covid-19, pueden estar en riesgo de padecer posteriormente apnea del sueño, producto de la fibrosis pulmonar que desencadena este nuevo coronavirus conocido como SARS-CoV-2.
“Este análisis pone en alerta el seguimiento y control de pacientes que han padecido coronavirus y que hoy puedan estar presentando trastornos del sueño, dado que la apnea del sueño puede ser tratada a tiempo evitando la aparición de nuevas enfermedades tales como Hipertensión Arterial y Diabetes Mellitus, que empeoran la calidad de vida y aumentan el riesgo de generar problemas graves de salud”, explica la especialista de Clínica Somno.
Pero, ¿qué es realmente el SAHOS o apnea del sueño? Son pausas respiratorias que tienen una duración mínima de 10 segundos, en donde el flujo de aire se ve interrumpido en su totalidad, pudiendo llegar a tener una duración de más de 60 segundos, generando graves consecuencias para la salud.
Si las apneas son muy frecuentes, la persona afectada permanecerá buena parte de la noche con concentraciones de oxígeno en sangre bajas, afectando su calidad de sueño.
Este patrón se puede repetir de 5 a 30 veces durante toda la noche, y en algunos casos severos hasta más de 100 veces, lo que dificulta la capacidad de alcanzar las etapas profundas y reparadoras del sueño. Además, las apneas generan riesgos por sus posibles complicaciones secundarias, sin embargo es fácil de diagnosticar y generalmente el paciente responde de manera positiva al tratamiento, cambiando sustancialmente su calidad de vida.