La temporada estival entrega un contexto de libertad y despreocupación que, de no ser tomado con la debida cautela, podría repercutir en consecuencias no deseadas producto de decisiones poco estudiadas. Además, la reacción al encierro prolongado durante el invierno mezclada con una mayor sensación de libertad durante el verano son una peligrosa combinación frente a fiestas y el impulso por socializar en persona.
“Primero que todo, siempre es importante evaluar las consecuencias del encuentro sexual desde lo socio – emocional: ¿me siento segura con esta persona; estoy de acuerdo con el nivel de intensidad de este encuentro; me siento cómoda con las repercusiones emocionales y sociales de este encuentro? Luego de hacer esa evaluación a conciencia, se debe hacer una en lo práctico: ¿tengo protección? Más allá de si la mujer está bajo algún tipo de tratamiento anticonceptivo de manera permanente o si el hombre porta preservativos, siempre se deben tomar precauciones adicionales si es que un eventual embarazo es una consecuencia no deseada”, recalca Carmen Gloria Bórquez, matrona de DecidoInformada.cl, sitio web especializado en salud física, mental y emocional de la mujer.
En 2009, el mercado chileno introdujo Escapel®, medicamento popularmente conocido como ‘píldora del día después’ por su conocido efecto de anticonceptivo de emergencia. “En caso de que no se haya utilizado un método anticonceptivo de barrera u hormonal, o que el método escogido falle, el anovulatorio de emergencia es una alternativa viable. Hay que recordar ingerir el medicamento no más de 72 horas posterior al encuentro sexual, siempre teniendo en cuenta que la efectividad es más alta mientras antes se tome”, explica la especialista en salud sexual.
Escapel® contiene levonorgestrel que es una progestina (hormona similar a la progesterona), en concentración de 1,5 mg (en la presentación por un comprimido) y que ejerce su acción impidiendo que se produzca la ovulación (salida del ovulo desde el ovario) y en segundo orden, espesando el moco cervical. Al no haber óvulo y encontrar, los espermatozoides, un camino poco amigable que dificultará su ascenso, no se producirá, en consecuencia, fecundación. Es similar a lo que ocurre con la administración de anticonceptivos orales de toma regular o intrauterinos.
El medicamento se distribuye de manera gratuita en el sistema público y también puede ser adquirido en farmacias sin necesidad de presentar receta médica. “En Decidoinformada.cl las pacientes pueden consultar dónde obtener la píldora. Nuestros profesionales, además de entregar información, también entregan orientación respecto de la salud sexual y reproductiva, acompañando a la mujer en la búsqueda del mejor método anticonceptivo para cada una según sus necesidades y preferencias”, puntualiza la especialista.
La píldora del día después, Escapel, es una alternativa segura, pudiendo ser consumida por cualquier mujer, independiente de patologías crónicas o enfermedades metabólicas. Sin embargo, es importante recordar que se trata de una opción de emergencia, pues no está pensada como anticonceptivo de uso permanente. La dosis de 1,5 miligramos de levonorgestrel fue respaldada -en 2005- por la Organización Mundial de la Salud (OMS) como un fármaco eficaz y seguro para evitar el embarazo. Actualmente, hay apenas un 25% de probabilidades que el medicamento, una vez administrado, cause un poco de náuseas, mareos y vómitos.