Una de las tradiciones más esperadas por los niños en Semana Santa es la llegada del conejito de Pascua de Resurrección, con sus huevitos de chocolate. Pero, ¿sabemos cuánto deben comer nuestros hijos? ¿O cuáles comprar? La nutricionista de Bupa Sport, Yael Toporowicz, nos orienta.
“Hay que cuidar el consumo de productos de chocolate en esta época, porque puede aumentar mucho la cantidad ingerida en un período corto de tiempo. Lo ideal es ir comiéndolos de forma parcial, a medida que pasen los días y no grandes cantidades, ya que incluso en algunos casos se da que reemplazan tiempos importantes de alimentación, como almuerzos o cenas. El exceso de energía consumida puede llevar a una ganancia de peso o un cambio en la composición corporal”, explica la especialista.
Cantidad de huevitos
De acuerdo a lo que indica la nutricionista, lo recomendable es que el consumo de azúcares simples sea menor al 10% de la ingesta total diaria. Es decir, si el requerimiento de una persona es 2.000 kcal, como máximo debiera consumir 200 kcal al día que provengan de alimentos ricos en azúcar refinada, tales como los chocolates. “Dependiendo del tamaño de los huevitos en general esto podría variar entre 6 a 10 al día, teniendo en cuenta que cada persona, y sobre todo los niños, tienen requerimientos diferentes de acuerdo al estado nutricional, nivel de actividad física, etc”, asegura.
Y es que si bien el cacao se caracteriza por tener altos niveles de antioxidantes y efectos positivos cuando este compuesto está presente sobre un 60-70% (generalmente chocolate amargo o bitter), la mayoría de los huevitos que ofrece el mercado tiene grandes cantidades de azúcar y materia grasa.
Ojo con las etiquetas
“En este sentido, es importante tener en consideración que cuando leemos un etiquetado nutricional, los ingredientes van en orden de proporción, es decir, los primeros ingredientes son aquellos presentes en mayor cantidad en ese alimento. Por lo tanto, cuando buscamos un chocolate que tenga mayor proporción de cacao, ingredientes como azúcar no debieran aparecer en primer lugar, sino que cacao o manteca de cacao que son los ingredientes principales de un chocolate de mejor calidad”, explica Yael.
Así, como bien dice el dicho, todos los excesos son malos y es importante entender que ningún alimento es dañino o bueno por sí solo, sino que la alimentación es un todo, que incluye hábitos saludables o no saludables. “Por eso, comer en conciencia es fundamental, así como saber cuáles son señales de hambre y saciedad, cuándo ya se ha comido una cantidad suficiente, y cuándo estamos comiendo sin prestar atención”, dice la especialista en nutrición.
No todo es chocolate
Como Pascua de Resurrección es mucho más que solo chocolates, Yael nos recomienda buscar otras actividades que permitan no centrarse únicamente en los huevitos de chocolate: “Podemos invitar a los niños a realizar actividades creativas, como pintar huevos de gallina, decorar conejos de papel u otros materiales; estos momentos además pueden ser una buena oportunidad para conversar con ellos sobre el significado de estas fiestas”, asegura la experta de Bupa Sport.