Los ladridos excesivos pueden resultar molestos no solo para nosotros, sino también para nuestros vecinos. Por eso, el primer paso para solucionar el problema consiste en entender por qué ladra nuestro perro. Algunos ladran porque intentan hacerle saber a su dueño que quieren algo, porque tienen hambre o sed, o simplemente porque quieren jugar. Si esto sobrepasa los límites razonables, es hora de enseñarle otras maneras de atraer su atención.
La experta de Gabrica (@somosgabricacl) y médico veterinario, Ana Monardes, explica algunas de las razones por las que los perros se pueden poner a ladrar sin control. “Los perros ladran para comunicarse, para demostrar afectos, invasión a la propiedad, aburrimiento, ansiedad, etc. Existen patologías en las cuales el ladrido forma parte de un síntoma o signo clínico (convulsión), de origen en el Sistema Nervioso Central (SNC), hepático u hormonal”.
El tipo de raza también influye en la frecuencia del ladrido. Entre las razas más ruidosas se encuentran los perros de jauría, como los beagles, los basset o los perros pequeños, como los terriers. Las razas que prefieren guardar silencio y ser más discretas son aquellas con rasgos más primitivos, emparentadas con los lobos, como el Husky Siberiano, el Malamute de Alaska, el Akita Inu o el Chow Chow.
Para aprender a identificar las razones que motivan los ladridos excesivos, debes conocer primero las distintas formas de vocalizar que tiene un perro y saber interpretar sus significados. Pero, además de las señales vocales, el tono o la frecuencia de ladrido, también debes prestar atención a las expresiones faciales, posturas y otros signos externos del perro que te pueden ayudar a comprenderlo mejor.
Por ejemplo, los ladridos fuertes, rápidos y repetitivos pretenden mostrar el instinto de defensa territorial. El ladrido insistente y repetitivo en un tono agudo busca llamar nuestra atención con la intención de conseguir algo. El ladrido compulsivo, a un volumen elevado y de forma nerviosa indica la frustración del perro, ya sea por no poder alcanzar un estímulo atractivo o por falta de atención.
Siete tips para evitar que tu perro ladre demasiado
- La importancia de la actividad física
Más aún si es un cachorro, las sesiones de juego son una excelente opción antes de dejarlo solo, ya que, si tu perro queda con demasiada energía, puede estar muy inquieto y le será difícil calmarse.
Por otro lado, es adecuado que no dejes que tu perro duerma largas siestas durante el día, o justo antes de acostarse. Porque si se queda dormido durante demasiado tiempo, no dormirá toda la noche, por lo que es mejor caminar y jugar dos horas antes de acostarlo para animarlo a dormir tranquilamente.
- Establece una rutina regular para ir al baño
Otra razón por la que tu perro ladra en exceso o llora mientras no estás con él, es porque necesita salir a hacer sus necesidades. Así que, si tu perro está llorando porque necesita salir, lo mejor es que te asegures de establecer una rutina de baño regular para él. De lo contrario, tu perro estará confundido y querrá salir todo el tiempo.
- Limita la comida y el agua antes de acostarlo
Además de establecer una rutina para ir al baño, intenta alimentar a tu perro a la misma hora todos los días, y nunca le des comida o agua demasiado cerca de la hora de acostarse, o tu perro tendría que salir. Idealmente, debes alimentar a tu perro tres horas antes de acostarse y evitar que tome mucha agua una hora antes de dormir para ayudarlo a calmarse durante la noche. Además, establecer horarios regulares para las comidas durante el día, también ayudará a tu perro a aprender cuándo esperar comida, y no a llorar o ladrar por ella.
- Mantén a tu perro entretenido
Un perro aburrido es muy ruidoso. Por eso, otra de las razones por las que tu perro ladra mucho, simplemente puede ser falta de entretenimiento. Es en esas ocasiones que los juguetes para masticar, los rompecabezas de comida y los juegos, son muy importantes para asegurarte de que tu mascota esté siempre ocupada y tenga algo que la mantenga interesada y entretenida.
- Verifica si hay algún problema médico
Si no puedes precisar por qué tu cachorro ladra cuando se le deja solo y has descartado distracciones, aburrimiento y otros factores desencadenantes, puede valer la pena consultar con su veterinario para saber si no pasa nada.
- No reaccionar a cada ladrido
Es importante que tu mascota aprenda a calmarse por sí misma. Puedes alentar y reforzar esta lección recompensando. De esta manera, tu perro aprenderá que su recompensa tiene relación con su comportamiento tranquilo y calmado.
- Crea un espacio seguro para tu perro
Un entorno seguro y de apoyo, es justo lo que tu perro necesita para que puedas ayudarlo a calmarse cuando lo dejas solo. Un refugio seguro con snacks, mantas reconfortantes y algo que huela a ti, como una camiseta vieja, ayudará a calmar a tu mascota, incluso cuando no esté a la vista.
En caso de que el can viva en departamento, la especialista de Gabrica, recomienda, “enriquecer el ambiente, realizar terapias conductuales con un especialista, utilizar nutracéuticos de origen natural u hormonal, establecer rutinas de paseo, que el padre de mascota juegue con su perro”. Asimismo, agrega “En la actualidad existen productos para calmar a un paciente de forma natural a base de aromaterapias y/o hormonas. También existen las terapias de conductas (etólogos, estudian las conductas instintivas) que son mucho más sanas y conducen a una solución del problema de base, a diferencia de lo que se usaba antiguamente que eran fármacos químicos (acepromacina)”.
En resumen, el adiestramiento siempre es la mejor vía de corregir la conducta de su perro. Sin embargo, recuerda que en la mayoría de los casos ladrar es una conducta normal de un perro. Sólo necesita tomar medidas cuando esto se convierte en algo desmedido y perjudicial. Si los ladridos persisten, una visita al veterinario no estará demás. Para más información ingresa a www.gabrica.cl