Trabajadores con contrato por día o por obra, mantienen su cobertura en salud por un año al dejar de trabajar. Para acceder al beneficio, deben acumular 60 días o 4 meses de cotizaciones dentro de los 12 meses anteriores.
Más de 34 mil trabajadores de la Región de Coquimbo se encuentran afiliados a FONASA en calidad de temporeros, opción que les permite mantener por un año su plan de salud una vez que han sido finiquitados, gracias a la denominada “afiliación extendida”. El beneficio está dirigido a quienes poseen contratos de trabajo por días o por obra o faena, siendo el principal requisito acumular 60 días o 4 meses de cotizaciones, respectivamente, en los últimos 12 meses.
Para acreditarse como trabajador por temporadas y/o acogerse al beneficio de la “afiliación extendida”, los interesados deben acudir a cualquier sucursal FONASA. Una vez que finalice su contrato, el asegurado y sus cargas familiares conservan íntegramente su cobertura en salud en establecimientos públicos o a través de la compra de bonos, aún cuando reciba Seguro de Desempleo, Subsidio de Cesantía, Subsidio Único Familiar o Pensión Básica Solidaria no afecta a cotización.
“Cuando se habla de temporeros se tiende a pensar en quienes se emplean en labores agrícolas, sin embargo, es posible encontrar personas que trabajan esporádicamente en los más diversos ámbitos productivos –construcción, turismo, comercio, etc.- a quienes por ende, no les resulta posible cotizar con la misma regularidad que otros trabajadores”, señala Antonio Eguren, Director(s) FONASA Dirección Zonal Centro Norte. “Al acreditar su condición de temporeros, sus derechos en salud se prolongan por un año a contar de la última cotización que registren, si han cumplido con el mínimo exigido”, añade.
En la Región de Coquimbo, más de 27 mil hombres y más de 7 mil mujeres se han acreditado como trabajadores temporeros, cifra que podría aumentar a raíz de la mayor difusión que se hace de este beneficio durante la temporada estival.
