Por: Claudia Rivera, Antropóloga, Consultora Tierra del Sol
Desde el 2002, cada 21 de mayo se conmemora el día de la diversidad cultural para el diálogo y el desarrollo, en este contexto cabe preguntarnos ¿Qué es la diversidad cultural y cuáles son sus implicancias?
Sin embargo, antes de contestar debemos hablar del panorama histórico cultural actual. Observamos que desde los años 90 asistimos a la denominada globalización, momento histórico que se caracteriza por la irrupción de medios de comunicación de masas como el cine, la TV, internet, además de la transnacionalización de la economía. Ambos factores contribuyeron al debilitamiento de las fronteras nacionales y la homogenización de los patrones de consumo y la amplificación de los valores de los países del primer mundo.
Dado lo anterior vemos que la globalización si tuvo consecuencias de tipo cultural, los valores de occidente llegaban de manera sostenida a los más variados rincones del mundo en un fenómeno que no tenía precedentes en la historia mundial, asistimos sin duda a un intento de homogenización cultural que contaba con los medios de comunicación como principal instrumento. Gracias a los medios de comunicación asistíamos, por medio de programas, películas y revistas a un modo de vida y valores occidentales y el mundo comenzó a considerar ese modo de vida como el más deseable y desdeñar sus propios modos de vida.
Vemos que el mundo es parte de la aldea globalizada, y marcas internacionales están presentes en lugares tan distintos como Bolivia y China. Pronto habría una reacción, no todos estaban conformes con la totalización y la lenta desaparición de las culturas locales, por ello ha nacido un creciente interés y valoración de lo local y de los culturalmente diverso, vemos la difusión de la medicina china o la medicina alternativa, un creciente número de seguidores de religiones de oriente, valoración e intento de conocimiento de grupos de indígenas del mundo, y discursivamente se aboga por la importancia de la diferencia, la defensa y rescate de culturas no occidentales. Esta tendencia es clara en ámbitos tan diversos como el turismo y cine, hasta la creación de políticas públicas internacionales en organismos como la ONU que buscan conocer y fomentar las culturas locales con programas de medicina indígenas o educación intercultural. Y es en este escenario donde aparecen medidas de fomento como el día de la diversidad cultural para el diálogo y el desarrollo.
Cabe reflexionar ¿qué significa un día de la diversidad cultural y el diálogo? Implica el reconocimiento y la valoración de las diversas culturas y la necesidad de comunicación que estas tienen. El diálogo implica la comunicación de partes en un contexto de respeto mutuo y horizontalidad.
El segundo elemento es el desarrollo, lo que implica el deseo que las culturas diversas tengas un crecimiento y mejora en las condiciones de vida. Sin embargo, nos enfrentamos a la dificultad que el concepto de desarrollo muchas veces es etnocéntrico, es decir, considera un crecimiento y calidad de vida en términos de la cultura occidental como por ejemplo la educación formal y el acceso a consumo sin considerar que muchas formas de vida tradicionales tienen otros parámetros de crecimiento y desarrollo y que estos elementos, son contradictorios a sus formas de vida.
Esto se relaciona con nosotros, ya que en la provincia del Huasco, existen modos de vida y prácticas culturas que son tradicionales locales de larga data, además, desde hace un tiempo asistimos a un incremento de las empresas instaladas en la comuna con el consiguiente aumento de población. Sin duda esto implica un crecimiento económico pero este crecimiento ¿está en armonía con las prácticas y modo de vida local?