Este año es esencial para el proceso de descentralización que ha impulsado el Gobierno, toda vez que durante 2016 debiera quedar aprobada por el Congreso la Ley de Fortalecimiento de los Gobiernos Regionales, lo que dará pie en 2017 para implementar la elección popular de los futuros gobernadores regionales -hoy intendentes- y así concretar el objetivo de obtener mayor autonomía política, administrativa y financiera para los territorios.
En el marco del Convenio CChC – Subdere firmado a fines del año pasado en La Serena y que busca reforzar el capital humano de los municipios, mejorar la cartera de inversiones, gestionar eficientemente los contratos y revisar las leyes y reglamentos, se realizó en la oficina regional de la Cámara Chilena de la Construcción (CChC) el primero de los 18 seminarios que a través de este acuerdo se efectuará en cada una de las sedes del gremio constructor.
Allí se conocieron más detalles del proyecto de ley que se tramita en el Congreso y que debiese ver la luz antes de fin de año. Por lo menos esa es la expectativa que tiene el Ejecutivo y que fue confirmado por el jefe del Departamento de Política de Descentralización de la Subdere, Osvaldo Henríquez, uno de los expositores de la jornada.
“Esperamos que la Ley de Fortalecimiento de los Gobiernos Regionales sea aprobada a fin de año para entrar a regir el 2 de enero de 2017, permitiendo la elección del gobernador regional ese año para que asuma sus funciones el 2018, donde se promoverá el proyecto de financiamiento regional”, aseveró Henríquez.
GORE TODOPODEROSO
Uno de los aspectos que más llamó la atención fue la descripción de funciones y competencias que tendrán los Gobiernos Regionales una vez que se implemente la ley. Esto, porque si bien hoy cuentan con amplias garantías para administrar recursos, desde el 2018 tendrían preeminencia sobre direcciones de servicios técnicos que hoy responden a una lógica sectorial (Ministerios).
La nueva normativa considera la creación de cinco divisiones que cubrirán desde temas planificación hasta desarrollo social. Así, se contará con una División de Planificación y Desarrollo Regional que propondrá las estrategias locales; habrá una División de Presupuesto e Inversión Regional que ejecutará y controlará las platas regionales. Hasta ahí ambas con funciones similares a las actuales divisiones de Planificación y de Análisis y Control de Gestión, respectivamente.
Eso sí, esto cambiará con la puesta en marcha de la División de Infraestructura y Transporte que verá las obras de conectividad y equipamiento que necesita la región, coordinando a servicios como Sectra, Serviu, Arquitectura y Obras Portuarias. En tanto, la División de Desarrollo Social y Humano promoverá planes de cobertura para los más vulnerables coordinando a Injuv, Fosis, IND, Sernam y Junaeb. Por último, la División de Fomento e Industria estimulará el desarrollo de innovación y capacidades empresariales coordinando a Indap, Sernatur, Corfo, Sercotec, Infor y la Corporación Regional de Desarrollo Productivo.
Al respecto, Osvaldo Henríquez de la Subdere fue claro: “La estructura de los Gobiernos Regionales que se ha diseñado es mínima y va a crecer en función de las nuevas competencias, pues a más competencias más recursos financieros y humanos. Lo que contempla la ley es una organización mínima para coordinar lo existente, por lo que no hay un aumento excesivo de la burocracia, pues se ajusta a los procesos”.
En esa línea, el presidente de la Comisión de Descentralización de CChC, Raimundo Rencoret, se mostró entusiasmado con que estas nuevas atribuciones logren cambios sustanciales. “El futuro gobernador regional tendrá las facultades para llevar adelante los intereses del territorio que representa, de manera de sacarlo adelante y generar un cambio en su desarrollo. Las competencias que tendrá, según lo detallado por la Subdere, va a marcar un cambio notorio en lo que conocemos de las administraciones locales en Chile”, acotó Rencoret.
En cuanto a su incidencia sobre las aéreas metropolitanas, los gobernadores regionales -quienes debiesen ser electos en 2017 a través de votación popular y directa- serán sus administradores y se les denominará gobernadores regionales metropolitanos (en conurbación de comunas de más de 250 mil habitantes). Ellos deberán proveer de un plan maestro de transporte, plan intercomunal de inversiones, ver los sentidos de tránsito vehicular, entre otras.