Distintos alimentos coloran nuestros dientes, siendo el vino tinto, el café, refrescos y gaseosas, té, bebidas energéticas,, salsa de soja, tabaco, los que más daño provocan. Y, a pocos días de celebrar unas nuevas Fiestas Patrias, la clínica Ortodontik -www.ortodontik.cl- entrega una serie de recomendaciones para protegerlos y prevenir el tinte de estos.
“El vino tinto, el terremoto y las bebidas oscuras son unos de los más grandes enemigos de los dientes blancos, siendo el primero el que sin lugar a duda más daño ocasiona a la estética de la dentadura dada su composición. Incluso también los brackets se ven afectados por su ingesta, especialmente por bebidas con colorante, como las de color naranjo”, explica Tamara de Mayo, directora de la Clínica Ortodontik.
Frente a los cítricos, tan utilizados en estas fechas para aliñar ensaladas o dar un toque especial a tragos, especialmente el limón, la especialista nos comenta que son sumamente dañinos por su acidez, “causando la disolución del esmalte y creando daño irreversible para los dientes”. La principal recomendación, entrega la ortodoncista, es “consumir los jugos cítricos con una bombilla y en lo posible tomar agua después, para lograr un lavado de estos”.
Por si fuera poco, la odontóloga alerta sobre el cuidado que se debe tener al masticar alimentos demasiado duros, como por ejemplo los cuescos de las aceitunas, ya que éstos “pueden rompernos una restauraciòn”. Y, agrega, “lo principal es no dar mordiscos grandes a las comidas y de preferencia cortar o partir los alimentos antes de ingerirlos. Aunque los incisivos están diseñados para desgarrar alimento, esto a la larga produce un desgaste, siendo mejor comer de a bocados pequeños y, con ello, evitar morder un cuesco sin darnos cuenta”.
Frente al daño que pueden causar ciertos alimentos a la pigmentación de la dentadura, Tamara de Mayo asegura que “no hay alimentos que blanqueen los dientes en forma natural. Es muy dañino escobillarse con bicarbonato de sodio otras sales puesto que desgastan el esmalte dental dejándolos al final con un aspecto opaco”.
La especialista aconseja, finalmente, que después de tantos asados y comidas dieciochenas lo más importante es lavarse los dientes y utilizar seda dental. En los casos más extremos, optar por cepillos interproximales para sacer los restos de carne u otras comidas que pudieron haber quedado atrapados entre los dientes y no olvidar antes de dormir usar un enjuague bucal con Flúor.
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