El destacado astrofotógrafo Arturo Gómez, no cuenta que pocas veces se da, en astronomía, que en una misma fecha “se unan tres acontecimientos tan espectaculares como son el solsticio, la Luna en fase de Cuarto Creciente y una “Gran Conjunción” entre los mayores planetas de nuestro sistema solar, como son Júpiter y Saturno”.
a) El primer acontecimiento será a las 07:02 horas de este 21 de diciembre con el fenómeno astronómico llamado Solsticio, el que da inicio a la estación del Verano, para todos los países ubicados en el hemisferio sur. Entre las características de esta fecha, es que el sol estará en su máxima posición sur del Ecuador Celeste. Será el día más largo del año con luz solar y la noche más corta de oscuridad. El sol se desplazará por sobre una línea imaginaria llamada Trópico de Capricornio y que pasa a unos pocos kilómetros al norte de la ciudad de Antofagasta. En el hemisferio norte, en ese horario, comienzan con la estación del Invierno.
b) En la tarde, la Luna inicia su fase de Luna en Cuarto Creciente, es decir, vista desde la Tierra, veremos un 50% de su superficie, iluminada por el sol.
c) Y quizás la más importante de todas es “La Gran Conjunción Planetaria” entre los grandes del sistema solar. Júpiter y Saturno, el de los anillos, estarán tan juntos como no se veían desde hace 800 y 400 años.
A contar de las 21:30 hrs y mirando hacia el poniente, es decir hacia el mar, estarán ambos planetas tan juntos, que se recomienda el uso de binoculares para poder “separarlos” angularmente. Júpiter y Saturno estarán dentro de la constelación de Capricornio y el sol en Sagitario, junto a Mercurio.
Como Júpiter y Saturno estarán tan bajos hacia el poniente, desde las 21:30 hrs., se recomienda su observación a partir de esa hora.
Este fenómeno de la Gran Conjunción, se verá mucho más espectacular desde lugares que no tengan contaminación lumínica ni polvo en suspensión, en la atmósfera.
En el pasado, durante la época del Nacimiento de Jesús, hubo una serie de fenómenos astronómicos asociados a la Estrella de Belén. En aquél entonces, la transparencia atmosférica era óptima y la visión de los fenómenos astronómicos, durante la noche ¡espectacular!
Estos tres acontecimientos astronómicos son visibles alrededor del mundo durante ese 21 de diciembre.