Si a principios de año el gremio proyectaba que el crecimiento de la inversión en construcción se ubicaría en un rango entre 0,1% y -1,9% anual, este lunes estimó que el escenario más probable es que se contraiga al menos 3% en comparación con 2021.
En la oportunidad, el presidente de la CChC, Antonio Errázuriz, se refirió a las complicaciones que enfrenta el sector. “Tal como la economía, la construcción también se está desacelerando y sus proyecciones se han deteriorado. Por ello, y por lo que significa esta industria en cuanto a actividad y empleo, hoy se requiere más que nunca el trabajo conjunto entre el sector público y el privado para salir adelante. Además, solo así se podrán hacer las obras que necesitan las personas para tener mejor calidad de vida y que el país tenga un crecimiento sostenible”.
Severo aumento del precio de los materiales
En tanto, el gerente de Estudios de la CChC, Javier Hurtado, señaló que “en este período, y en el mejor de los casos, el precio de los materiales de construcción ha subido al menos cuatro veces más que el IPC, lo que se traduce en que, por ejemplo, el costo de construcción de edificios de departamentos ha aumentado 17% en un año y 14% el de casas”.
Asimismo, indicó que “los mayores costos también están impactando el desarrollo de las obras de infraestructura. De hecho, tenemos contabilizado al menos una veintena de proyectos de edificación pública, de un alto valor social, que están con problemas para su continuidad”.
Hurtado explicó que las empresas más afectadas son las que han suscritos contratos con mandantes como el Estado, que en la gran mayoría de los casos no tienen sistemas de reajustabilidad.
Alza de tasas y menores ventas inmobiliarias
El gerente de Estudio de la CChC agregó que de principio de 2021 a la fecha la tasa de interés de los créditos para la vivienda casi se ha duplicado y hoy, además, se están otorgando a un menor plazo.
“Esto significa, por ejemplo, que en un año –de febrero 2021 a febrero 2022– el monto del dividendo mensual por un crédito de 1.600 UF para comprar una vivienda de 2.000 UF aumentó en casi $138.000 por el efecto combinado de mayor tasa de interés y menor plazo. En el mismo período, el ingreso familiar mínimo exigido para este crédito aumentó en poco más de $500.000”, comentó.
Esto ha hecho que en el mismo período el flujo de colocaciones de créditos para viviendas haya disminuido en casi 60% y que para este año se proyecte una contracción de las ventas inmobiliarias de 23% en Santiago y de 24% en el resto del país (vs. la caída de 17% prevista en enero pasado).
Impacto en el déficit habitacional
Por su parte, la gerenta general de la CChC, Paula Urenda, manifestó la preocupación del gremio ante el desafío de reducir el déficit habitacional.
“Se necesitan cerca de 800.000 viviendas para las familias que no tienen un techo digno para vivir, pero, con este escenario, se hará más difícil satisfacer esta urgente demanda social. Por ejemplo, solo por efecto del aumento de los costos de construcción provocado por el alza del precio de los materiales hay empresas que han debido renunciar a desarrollar proyectos de la política habitacional”.
Situación que, según agregó, se verá agravada por la próxima eliminación del Crédito Especial a Empresas Constructoras, que aumentará los costos de construcción en otro 12%, aproximadamente.
Al respecto, la ejecutiva sostuvo que “nuestro país debe y puede terminar con el déficit habitacional cuanto antes. Pero para ello es necesario, en el corto plazo, resolver problemas como el alza de los costos de construcción, generar las condiciones para que disminuyan las tasas de interés de los créditos hipotecarios y las restricciones de acceso e impulsar una nueva política habitacional, que refuerce la colaboración entre el sector público y el privado”.
Propuestas del gremio
En el marco de la presentación de las proyecciones sectoriales el presidente de la CChC, Antonio Errázuriz, propuso seis caminos de acción para mejorar las perspectivas del sector, cuidar el empleo y fomentar el desarrollo de las obras que las personas y el país necesitan.
- Impulsar la inversión privada y el crecimiento económico.
- Fortalecer la alianza público-privada.
- Reponer el equilibrio económico en los contratos con el Estado.
- Compensar a las familias afectadas por la pérdida de beneficios como el CEEC.
- Evaluar en su conjunto los proyectos de reforma tributaria y laboral.
- Elevar la productividad de la construcción.