La reducción de la Huella de Carbono en el trabajo es una de las aristas más importantes para llevar la sustentabilidad a hechos concretos, considerando la gran diversidad de actividades económicas que existen.
Por ejemplo, según datos de la Agencia Internacional de la Energía, solo ese sector incrementó en 6% sus emisiones a nivel mundial en 2021, alcanzando 36.300 millones de toneladas, cifra récord y que supone una fuerte preocupación.
Si bien, las miradas tienden a focalizarse en industrias específicas, que son las que lideran las emisiones -como la energética-, desde el área de recursos humanos destacan que la sustentabilidad es ante todo una situación social, y que por ende establecer una cultura dentro de las organizaciones es fundamental y el primer eslabón que debiera considerarse.
“Una cultura de sustentabilidad, en que cada persona comprenda lo importante que es hacer el cambio desde su acción, debe ser el primer paso para gestar un cambio, y a partir de ahí lograr el compromiso de las organizaciones para reducir su Huella de Carbono”, explica Jorge Gamero, Gerente General de ManpowerGroup Chile.
En ManpowerGroup se han reducido las emisiones de gases efecto invernadero (GEI) en un 26% a partir de 2019, y se ha diseñado un plan de acción climática alineado con los tratados vigentes y la discusión ambiental actual.
En ese sentido, el ejecutivo destaca que es igual de relevante que las organizaciones se impongan metas medibles y cumplibles en el tiempo, pero que, sin una motivación genuina, es muy difícil que dichos objetivos sean alcanzados.
“En el caso de ManpowerGroup, un líder del sector de soluciones de capital humano, nos hemos impuesto el desafío de reducir a cero las emisiones de Huella de Carbono para el año 2050 o antes. Pero más allá de esa declaración de intenciones, es fundamental, primero que todo, generar una política interna que facilite y controle el cumplimiento de ese gran objetivo”, agrega Gamero.
El desarrollo de ESG
Para que la sustentabilidad se logre a nivel humano, las organizaciones están llevando a otro nivel el concepto ESG (Enviromental, Social and Governance), que en otras palabras en el mecanismo por el cual se vuelven más sostenibles a partir de un mayor compromiso social, ambiental y de gobernanza.
Jorge Gamero explica que “en la situación de pandemia que nos tocó enfrentar en los últimos dos años, la administración del capital humano vivió un verdadero punto de inflexión, en que no solo era importante encontrar los mecanismos para que las compañías siguieran rentabilizando y generando riqueza, sino que también velaran por las mejores condiciones posibles para la retención de sus talentos. Esto se logró mediante la definición de formatos de trabajo remotos, mayor flexibilidad, disminución del riesgo de contagios y contención emocional en muchos casos. Los cambios en el mundo laboral continuarán, y así también el cómo las empresas enfrentan sus metas para ser sostenibles, primero socialmente, y luego en el día a día del negocio”.