Un proyecto de ley que tiene como objeto de establecer sanciones determinadas -como la prohibición de por vida de ingresar a estadios-, en contra de las personas que cometan actos de racismo en el contexto de un espectáculo deportivo de fútbol. Esto, por motivo de “conductas inaceptables que han tenido algunos mal llamados hinchas de equipos chilenos en torneos internacionales”, explicó el Marco Antonio Sulantay e integrante de la comisión de Deportes.
“Si bien hace ya varios años”, comentó el parlamentario por Coquimbo, “las autoridades deportivas han trabajado arduamente a nivel mundial para controlar los actos de violencia en los enfrentamientos deportivos, a modo de garantizar el normal curso de éstos. Para ello, tanto autoridades públicas como privadas han debido acordar medidas de control para evitar que se produzcan actos violentos”.
“Sin embargo, hemos visto un fenómeno que no tiene cabida, no sólo en el fútbol, sino en el deporte en general y también en nuestra sociedad, relacionado con gritos racistas, no sólo a jugadores, sino también a seguidores de otros clubes que han venido estas últimas semanas a Chile a participar de la Copa Sudamericana o la Copa Libertadores”, indicó Sulantay.
El parlamentario por el Distrito 5 subrayó que “no existe ningún grupo étnico, creencia religiosa ni sexo superior al otro, y que el deporte debe generar conciencia de integración y no de segregación, toda vez que independiente del color de la piel de los jugadores y fanáticos y de la cultura de unos y otros, todos admiran el deporte de la misma manera y los equipos se integran en virtud del talento de los seleccionados y no de otras consideraciones”.
“Lo ocurrido en los estadios Monumental y San Carlos de Apoquindo, nos ha alertado a tomar medidas concretas en esta materia, pues el racismo y la discriminación son problemas contra los que se debe luchar en las distintas aristas de la sociedad. En Gran Bretaña se adoptaron medidas similares para erradicar a los hooligans de los estadios. Hoy la liga inglesa destaca porque no hay rejas en los estadios y el racismo no se tolera bajo ninguna circunstancia. Para allá debemos apuntar”, concluyó el diputado Marco Antonio Sulantay.