Tras realizar un pago simbólico, el presidente del Banco Central, José De Gregorio, puso en circulación el nuevo billete de 1.000 pesos, siendo el quinto y último de la ‘Nueva Familia de Billetes’.
En la oportunidad, destacó que “nunca antes en la historia de Chile se había reemplazado a toda un familia de billetes, teniendo como único objetivo su modernización y sin que la razón fuera el estar sumergidos en alguna urgencia de la historia o en una crisis”.
“Hoy queremos manifestar el orgullo que significa para el Banco Central de Chile haber llegado a este momento con un nivel de aceptación tan alto de la población”, sostuvo.
El instituto emisor puso hoy en circulación una primera partida de 34 millones de nuevos billetes de 1.000 a través de los bancos comerciales en todas las regiones del país, iniciando un proceso gradual de reemplazo que se estima en alrededor de un año y que alcanzará a los 140 millones de unidades que circulan actualmente.
El nuevo papel moneda estará disponible en las sucursales bancarias y gradualmente en los cajeros automáticos.
El próximo 15 de mayo se iniciará una campaña publicitaria en medios escritos, audiovisuales y digitales, informando a la ciudadanía las características de este nuevo papel moneda.
La nueva versión de 1.000 pesos, al igual que los de 2.000 y 5.000 pesos, será de material polímero, y en su anverso contará con un relieve pronunciado y una ventana transparente compleja, que en su interior incorpora al personaje y el su valor.
Asimismo tiene una imagen del número incompleta en cada una de las caras -que al mirar a contraluz forman el número 1.0 en su plenitud- y el Antú, que al inclinarlo cambia de color verde a color oro.
El anverso de este medio de pago mantiene el retrato de Ignacio Carrera Pinto, esta vez basado en un retrato realizado por Juan Manuel Huidobro en 1982, perteneciente a la colección de la Escuela Militar. Además, incorpora la imagen del corazón del Copihue, flor nacional y el Antú, símbolo mapuche que representa el sol que fecunda la tierra, en la misma posición que los billetes de 2.000 y 5.000 pesos.
El reverso muestra una imagen del Parque Nacional Torres del Paine, ubicado en la región de Magallanes, que destaca por la espectacularidad de su paisaje y formaciones rocosas, que lo convierten en un destino turístico único y con gran fama internacional.
Por su parte, la fauna está representada con la imagen de un guanaco, mamífero rumiante que habita en la Cordillera de Los Andes entre Perú y Tierra del Fuego, generalmente en lugares de poco movimiento.
La puesta en circulación de la Nueva Familia de Billetes ha sido un proceso gradual, que ha incluido todas las denominaciones y que se inició en septiembre de 2009 con el billete de $5.000, seguido por la puesta en circulación del billete de $10.000 en marzo, de $20.000 en julio y de $2.000 en noviembre de 2010.