Las autoridades del sector agrícola, junto al Intendente (s) Pablo Argandoña, han sostenido nuevas reuniones para detallar el programa de bombardeo de nubes que se iniciaría en mayo, según se definió en el Comité Interregional de Emergencia Agrícola hace pocos días.
El Intendente (s) recalca que “el agua es motivo de preocupación nacional y regional y se están generando iniciativas tan importantes como el bombardeo de nubes, pero esto requiere el aporte de todos, todos somos actores y necesitamos el recurso hídrico por lo que estamos buscando la fórmula para que tanto el Gobierno como los privados aporten a este proyecto”.
En tanto, el Seremi (s) de Agricultura Álex Madariaga explica que “están los tiempos acotados y en base a eso estamos direccionado los próximos pasos a seguir para aterrizar los aportes de los privados y aportes públicos, así como las medidas a tomar, para tener a fines de febrero información más definitiva para entregar al Ministerio de Agricultura”.
EL PROYECTO
La estrategia de aumento de la disponibilidad del recurso hídrico a través de la estimulación de precipitaciones artificiales, es uno de los sistemas más utilizados a nivel internacional para la mitigación del déficit hídrico. Se trata de generar precipitaciones de forma artificial interviniendo el ciclo hidrológico y la mecánica de formación de la misma. En este proceso, el elemento que mejores resultados prácticos ha demostrado es el yoduro de plata cuya conformación molecular es similar a la del agua.
En el caso del proyecto planificado para nuestra región, en conjunto con Atacama, Valparaíso y la región de O’Higgins, el presupuesto alcanza los 400 millones de pesos anuales por región en un plan de aplicación en 3 años.
El incremento promedio que se obtiene con la aplicación de la siembra de nubes con yoduro de plata, ya sea con la modalidad terrestre o aérea es del orden del 10 al 15%, por sobre la cantidad de precipitación que habría caído en forma natural.